Escucho mi cigarro

Y escucho como se consume mi cigarro mientras veo la canción que me gusta. - No es que me guste por lo que dice, ni por su ritmo ni nada por el estilo, simplemente por que me hace recordar... cuando la miro es como si mi mente se colapsara, se queda en blanco y me quedo mucho más relajada. - Noto a la gente pasear bajo mi balcón: algunos van con su pareja felizmente, otro con amigos o los típicos solos sin rumbo que en vez de estar en un balcón como yo, deciden ir a pasear.
Sensaciones extrañas recorren mi cuerpo. No entiendo que me pasa, estoy feliz pero a la vez melancólica. Vuelvo a escuchar mi cigarro...
Me siento extraña conmigo, no me reconozco. Demasiado fuerte para ser yo, poco sensible ante tanto problema. Quizá he cambiado, quizá es eso que llaman madurar o simplemente he cambiado y ya esta, no hay más explicación.
Apago el cigarro, me acabo la cerveza y cierro el balcón... Ya no siento nada.

A veces, las cosas imposibles pueden suceder

Sabanas

Y entre unas sabanas jugábamos, Con miradas complices y caricias descuidadas. Recuerda cada una de las palabras dichas, de los silencios callados y las sonrisas compartidas. Momentos que al tumbarte te acordaras solo con cerrar los ojos. Inevitable melancolía al estar sólo en unas sabanas ya compartidas. Colonia que inundaba todo el cuarto...
Buscame, encuentrame, quizás aún sigo entre las sabanas de aquella cama...

Siempre tendrás la duda de saber a que sabía nuestro ultimo beso, nuestra ultima caricia, nuestro ultimo momento...

Mis personas

Yo, persona realmente insignificante en este gran mundo. Persona donde le pasan mil desgracias y solo una buena. Donde siempre le encuentran mil defecto y cincuenta virtudes. Una persona que paso desapercibida, que no destaco entre una gran multitud de personas. Yo, simplemente yo tengo la gran suerte de tener a las personas adecuadas en mi vida, con las que comparto el día a día. Personas por las cual me gusta salir y reírme. Personas que me demuestran una vez tras otra, que pase lo que pase, no me dejaras tirada como otras en su momento hicieron.
Gracias a esas personas, me siento afortunada, me siento lo mejor del mundo, la persona que destaca y que todo el mundo mira (aunque claro, si me pongo ha hacer el payaso, ¡¡obviamente me miran!!). Personas que me hacen seguir el día a día sin derrumbarme y animándome, por que saben, que algún día todo este mal que me pasa se convertirá en algo bueno. No tendré manera de agradecerse lo.

Un fin

. Hoy se que no soy nada sin ti, que muchos errores cometimos y cometí. Que sufrimos demasiado queriéndonos para que ahora ya no queda nada... Ya todo olvidaste hasta a la persona que te ha querido mas en esta vida... Pero la amargura que tengo nunca jamás la veras. Me la guardare para solo dejarla ir cuando esté sola. Porque de nada sirve hacerlo delante tuyo si ya nada sientes. Te echo de menos, no es un sentimiento bonito si sabes que la otra persona ni siquiera se acuerda de todos los momentos vividos. Y no hace nada por recordarlos, esos momentos que fueron y son los mejores de mi vida. Muchos de ellos jamás los podré repetir con nadie, porque todo contigo fue especial aun que me porte mal, te demostré mucho... Hoy cerrare los ojos, para no ver la realidad... No estás en mi vida, ni lo estarás nunca más pero siempre estarás en mi corazón. Lo que me da más rabia de todo esto, es que yo no estoy en tu vida ni en tu corazón... Todo está en silencio ya sin ti y todo seguirá así hasta que decida mi corazón rendirse. Ojalá la que pudiera decidir fuera yo y no mi corazón solo tengo guardados nuestros momentos más bonitos ese 30 de Octubre en aquel banco del un parque que no conoce nadie, ese primer beso... Y la despedida sentía como si no quisiera que te fueras nunca más de mi vida. Y es que me apretabas tan fuerte que me sentía dentro de ti, no quería salir. Luego vinieron los te quiero, los besos, los abrazos... las miradas, las sonrisas, tus manos, nuestras fotos, esas noches que pase junto a ti y esos pequeños detalles que día a día hicieron que fueras siendo parte de mi. Un día llegamos a dar un paso más y nos entregamos el uno al otro fue, lo más bonito de mi vida y con nadie podré repetirlo. Me sentía feliz, era feliz, nuestro primer año. Revivir ese día, junto a ti, estábamos juntos de nuevo y seguía siendo feliz a tu lado... Ahora llega ya, otra vez, el ansiado día si estuviera contigo. Pero el temido ahora que se que no estás aquí, se que ni siquiera te acuerdas, se que si te acuerdas no te importa y que no estaré aquí. No sé si por suerte o no pero te aseguro que este donde este pensare todo el día en ti y en ese primer día, en ese primer beso, en tu sonrisa tus manos tu mirada y en todo lo que fue un día NOSOTROS que nunca volverá. Y sin darme cuenta te perdí. No encontraré a nadie que pueda hacer olvidarme de ti! Tu fuiste eres y serás siempre el mas especial y al que he querido más… No solo querido, amado,¡¡todo yo eres tú!! Pero ya nada puedo hacer solo hacer como si nada me afectara, aunque tengo que verte cada día… Hacer como si no hubiera pasado nunca nada de esto. Sin poderte tocar, besar y lo que más daño me hace es el no poder abrazarte... Habiendo compartido todo lo que tengo y he tenido, compartido mi vida…  Ahora tengo que hacer como si no me importaras... Te necesito... pero tú ya no estas...

Mi película

Y yo no estoy viviendo en una película donde todo es bonito y al final acaban ganando los buenos, la luz, donde la princesa se casa con su amor y tiene una vida feliz, yo no vivo en una película donde la protagonista acaba como siempre había soñado desde pequeña...

Yo vivo en una película donde los malos acaban ganando, donde gana la oscuridad y la gente que hace daño, los que hacen trampas y utilizan a los demás, donde no sabes por donde te saldrá la jugada, donde nadie sabe vivir el presente y siempre mira hacia el futuro. Vivo en una película donde el daño se hace día a día hasta a la persona que más quieres, donde el amor que la protagonista casi nunca se cumple, Vivo en una película real.

La cagas...

Y apareció entre las luces blanquecinas. En ese momento estaba ilusionada, pensaba que algo bueno sucedería, pero estaba equivocada.
¿Y para que volvió si solo trajo una sombra oscura para tapar la luz propia que me había creado desde que se fue?
Vivía feliz en mi ignorancia, sin saber que pensar. Me había acostumbrado y creído mis propias mentiras. Estaba acostumbrándome a vivir con ese dolor que poco a poco iba desapareciendo. Pero otra vez, a resurgido desde el baúl de los recuerdos, (¡¡que no quiero recordar!!) ese que tengo bajo llave en el fondo del armario.
Me tocas las narices... Me haces abrirla inconscientemente y con ello mi ignorancia y felicidad desvanecen. ¿No lo entiendes? Siempre que apareces la cagas y me haces más daño... Un daño que no puedo esquivar, uno que prometí 100 veces que no me dolería más y 100 veces que rompí la promesa.
Desaparece, al menos hasta que pueda evitar que puedas controlarme con tanta facilidad...